El Gobierno informa que, además de la investigación
interna, la Comandancia de la Guardia Civil de Madrid ha
abierto diligencias, en
respuesta al senador de APDDA, Carles Mulet
El Gobierno asegura que la Comandancia de la Guardia Civil de Madrid ha abierto de oficio
diligencias, además de una investigación interna, para averiguar lo sucedido en la
agresión a un activista antitaurino de Valdemorillo (Madrid), por parte de un
agente de la Guardia Civil. La información se ha trasladado por escrito al
senador Carles Mulet, de la ‘Asociación Parlamentaria en Defensa de los
Animales’ (APDDA), en contestación a una pregunta registrada sobre dicha
agresión y ocurrida el pasado 6 de febrero.
Según el agredido, Óscar del Castillo, de la organización antitaurina ‘Gladiadores por la Paz’, a pesar de su actitud pacífica, recibió puñetazos, insultos y amenazas por parte de un Guardia Civil, tras haber saltado al ruedo en protesta por la novillada con picadores de Valdemorillo, donde tradicionalmente se abre la temporada taurina española. Además, éste le gritó que se quitara la camiseta de activista – que, finalmente le quitaron entre varios agentes – con el lema ‘Ni un paso atrás. Abolición’. Del Castillo asegura que se sintió “desprotegido, humillado, vejado, y lo que más me ha dolido es que llamase ‘puta’ a mi hija de 9 años. Y todo esto por pedir que no se maltrate a un animal inocente por diversión".
El
Gobierno señala que el objeto de las investigaciones es conocer los hechos
ocurridos y “aclarar e individualizar posibles responsabilidades de los guardias civiles”.
Por ello, la primera de las diligencias es la citación del testigo-víctima para
que declare y aporte las pruebas de que disponga sobre la agresión, así como
las grabaciones realizadas.
APDDA