"El País" 11/12/2018
El proceso imparable de descosificación de los animales llega también al
ordenamiento jurídico español. La gran mayoría de las enmiendas son
fruto del trabajo de las juristas de INTERcids-Operadores Jurídicos por
los Animales y han sido promovidas por APDDA
El Congreso de los
Diputados ha comenzado hoy la tramitación de un proyecto de ley que modifica la
legislación actual para que los animales dejen de ser calificados como objetos
y sean considerados seres vivos dotados de sensibilidad. Se trata de evitar que
puedan ser embargados por impagos o de regular con qué familiar permanecen en
el caso de separaciones o divorcios. El Código Civil actual considera a los
animales como cosas, en concreto como bienes muebles, indica la exposición de
motivos del proyecto de ley, presentado por el PP hace un año. La iniciativa,
que partía de una proposición no de ley de Ciudadanos, salió en ese momento
adelante con el voto unánime de todas las fuerzas parlamentarias. Ahora se ha
constituido la ponencia donde los grupos han iniciado las negociaciones para
redactar un texto definitivo, que prevén tener finalizado en febrero de 2019.
Los partidos han presentado 115 enmiendas al texto inicial.
La reforma pretende
regular el destino de las mascotas en casos de divorcio o separaciones primando
el interés de la familia y el bienestar animal. De esta forma, se introducen
"preceptos destinados a concretar el régimen de custodia de los animales
de compañía, cuestión que ya ha sido objeto de controversia en los tribunales",
explicita la proposición de ley. También se contempla que se reparta el tiempo
"de disfrute" de ellos.
La modificación del
apartado primero de la Ley Hipotecaria propone que se impida la extensión de la
hipoteca "a los animales colocados o destinados en una finca dedicada a la
explotación ganadera, industrial o de recreo y se prohíbe el pacto de extensión
de hipoteca a los animales de compañía". También se cambia el artículo 605
de la Ley de Enjuiciamiento Civil para "declarar absolutamente
inembargables a los animales de compañía". El texto inicial a estudio
especifica que "el derecho de disponer de un animal no ampara su
maltrato" como tampoco su abandono o sacrificio, "salvo en los casos
establecidos en las normas legales o reglamentarias".
También se negociarán
aspectos como la guarda y custodia del animal por parte de terceros, gastos de
manutención o la posibilidad de que se pueda asumir el cuidado temporal de un
animal abandonado si es por su protección y bienestar.
La diputada de Unidos
Podemos, Sara Carreño, explica que su grupo propuso medidas más ambiciosas que
se podrían circunscribir en una ley de igualdad animal. "Pero el PP no
quería que se afectara a los toros", aclara. A pesar de ello, está de
acuerdo con la mejora. Pide que se defina bien lo que es el maltrato animal y
recuerda el vídeo en el que se observaba a varios perros de caza despeñándose
cuando acorralaban a un ciervo. A Carreño le gustaría que "por lo menos"
se dejara de subvencionar a los toros o a cualquier otra actividad que implique
maltrato animal.
Avelino Barrionuevo,
parlamentario del PP en la ponencia, considera que algunas de las enmiendas que
se han presentado otros grupos se corresponden más a una ley de bienestar
animal, que no es el objetivo de la modificación legislativa planteada.
"La idea es que haya el máximo consenso en la tramitación del texto. Que
seamos generosos", sostiene. Barrionuevo añade que su grupo ha presentado
13 enmiendas a la ley, "algo no habitual, dado que el proyecto de ley es
nuestro". Pero las conversaciones con asociaciones y otros grupos les
hicieron ver algunas carencias en el texto inicial. Por ejemplo, en una de
ellas se propone que en el caso de una lesión de un animal de compañía, causada
por un tercero, su propietario o quienes convivan con el animal tienen derecho
a una indemnización no solo la que actualmente se fija por responsabilidad
civil, sino en "concepto de daño moral".
El PSOE está de acuerdo
en la búsqueda de consenso. El diputado socialista Javier Antón Cacho comenta
que se trata de canalizar las demandas de las asociaciones animalistas.
"El talante es constructivo y está encaminado a adoptar decisiones acordes
a la sensibilidad social actual", añade.
La medida ha sido bien
acogida por asociaciones como Igualdad Animal, aunque su portavoz, Javier
Moreno, la considera insuficiente. "Lo que hace falta es una ley de
protección animal de todo el Estado, de tal forma que no dependa de cada
comunidad medidas como el sacrificio cero de animales de compañía, que deben
incluir programas de esterilización y de potenciación de la adopción".
Aboga al mismo tiempo por la prohibición de los espectáculos con animales, como
los circos o la tauromaquia. "En la actualidad depende de cada municipio,
lo que hace falta es voluntad política y valentía, porque en España estamos a
la cola de Europa en leyes sobre protección animal, aunque la concienciación
social ha aumentado en los últimos años", concreta.
La abogada Eva Ramos de
Pacma recuerda que 115 enmiendas dan para mucho y que el texto final variará
"dependiendo de lo que se incluya o no". Ramos pide que se defina a
qué se considera un animal de compañía y que se contemple la posibilidad de que
se pueda retener al animal de formal temporal en casos de malos tratos. La
abogada plantea que hay que tener en cuenta que el maltrato animal se utiliza
muchas veces como herramienta para controlar o infundir temor a la persona en
casos de violencia de género, "sin que existan consecuencias
penales". "A nosotros nos
llegan demandas de personas que están siendo maltratadas y no son capaces de
irse por no abandonar a sus animales".